Érase una vez una isla diminuta de aguas turquesas en la costa Pacífica de Panamá. Era tan pequeña que los bombarderos norteamericanos la usaron como diana en sus pruebas de tiro en la II Guerra Mundial. Los cráteres dejados por aquellas bombas, recuerdan que hubo un tiempo en el que a nadie le importaba aquel deshabitado islote con nombre de reptil.
Ahora Isla Iguana sí importa, y desde la década de los ochenta, el volcánico islote es un protegido Refugio de Vida Silvestre que atrae a científicos y turistas.
Sobre ella solo habita un humano, el guardaparque. Pequeño, ojeroso, y reservado, vive acompañado por cinco mil fragatas, un ejército de cangrejos tricolores, una marabunta de ermitaños, una manada de iguanas, y un arrecife de coral.
De vez en cuando, recibe la visita de pescadores, delfines en el horizonte, tortugas que vienen a excavar sus nidos, pelícanos, ballenas …
Sabíamos que de julio a octubre las ballenas jorobadas o yubartas merodean por la zona, y desde que subimos al bote que nos llevaría a la diminuta isla, yo crucé los dedos para tener suerte y avistarlas…
Debió funcionar ☺ porque en los veinte minutos que duró la travesía pudimos verlas. Eran una madre y una cría, y aunque fue emocionante… nos supo a poco, navegaban algo lejos, ellas seguían su rumbo y nosotros el nuestro…
—Seguro que luego las verás desde la orilla… se quedan dándoles vueltas al islote— me consolaba el anciano barquero.
Al desembarcar en la playa nos recibe el guardaparque, la soledad, y una arena blanca cubierta de rastros dejados por las colas de las iguanas.
La extrema bajamar complicaba el acceso al arrecife, y decidimos comenzar por explorar la verde tierra firme.
Caminamos por los dos únicos senderos, llegamos a otra playa más agitada, nos sobrevolaron los buches rojos de las fragatas, visitamos el viejuno Centro de Interpretación…y cuando la marea subió un poco corrimos hacia el turquesa mar.
Armados con gafas y tubos nos bañábamos solos en el arrecife, todo un lujo, nadábamos rodeados de peces y corales, con una visibilidad fantástica,…cuando de repente maridín me llamó para que saliera a la superficie…
—¿Qué pasa?—pregunté al sacar la cabeza.
—¡¡Mira!! —dijo maridín ojiplático señalando el horizonte.
¡¡Mis ojos no creían lo que veían!! las ballenas estaban tan tan cerca que podía ver y escuchar sus fuertes soplos… ☺ Fue un momento mágico, muy especial ☺ inolvidable.
Me recuerdo quieta, suertuda, alucinada y emocionada como una niña pequeña. Disfrutarlas dentro del agua tan cerca, a ras del horizonte, fue una experiencia nueva desde una perspectiva fantástica ☺ todo un regalo de la vida.
Tal y como nos dijo el arrugado barquero, la madre y la cría se dedicaron toda la mañana a rodear la isla. Nosotros en nuestro infinito baño, buceábamos pendientes de ellas y del lejano horizonte donde brillaban lomos, veíamos remotos soplos, saltos acrobáticos,… Fue todo un espectáculo ☺ pero la diminuta isla agujereada por bombas aún nos reservaba otra sorpresa inolvidable y mayúscula.
Recuerdo que salí a beber. Sentada en un rústico banco me encontré a una solitaria anciana que me saludó y me invitó a sentarme. Conversaba con ella cuando de repente… escuché el característico silbido de maridín llamándome. Los muchos aspavientos que hacían sus brazos me indicaban que había mucha urgencia, me despedí con educación de la señora y corrí hacia el mar…
—¡¡Escucha!! —y a modo de avestruz maridín metió la cabeza bajo el agua.
Le imité… ¡¡ y no podía creer lo que escuchaba!! …
—¿Es? ¿a que sí? —preguntaba maridín buscando mi corroboración científica…
—¡¡¡SÍ!!!! ¡Sí! ¡Síííí!!! ¡¡ES!! ¡¡ES!! ¡¡Es el canto de una ballena!!! —dije dando saltos de alegría, con los ojos borrosos y la piel como un pollo de auténtica felicidad ☺ ¡¡Ni en mis mejores fantasías marinas, que son muchas ☺ , imaginé un momento como aquel!!
Sonaba una melodía suave, embriagadora, alucinante,… casi adictiva,… La acústica del agua hacía que llegara con claridad hasta nosotros aquella mágica canción de la yubarta, una canción aún hoy llena de misterios para la ciencia.
Un lejano macho debía cantar más allá del profundo talud que rodea la isla. Son ellos quienes poseen el sistema de canto más complejo, y su finalidad aún está llena de incógnitas y de hipótesis; quizás lo usan como comunicación, o como reclamo sexual, o para delimitar el territorio, o para desafiar a otros machos,… o para todo eso y más…
Su función no está clara, pero sí está claro que las yubartas son unas ballenas de record; son los mamíferos que más distancia recorren en sus migraciones, poseen las aletas pectorales más grandes del reino marino… sus cantos duran 10-20 minutos pero pueden cantar durante 24 h ininterrumpidas…
Escuchándolas bajo el mar era imposible no recordar las muchas historias de marineros y sirenas… Un canto tan mágico, irreal o surreal, seguro que debió confundir a muchos hombres del mar.
Fue muy especial escuchar y sentir aquellos acordes ☺ Buceábamos rodeados de música, nadábamos y flotábamos en la superficie con los oídos sumergidos disfrutando del conciertazo. En algún momento abrí los ojos, y al ver el cielo azul sonreí al recordar el curioso disco de oro que aún viaja a bordo de la sonda espacial Voyager.
The sounds of Earth , Los sonidos de la Tierra, se llama este dorado recopilatorio (Fuente imagen: Wikipedia)
Este disco gramófono que la NASA y Carl Sagan enviaron al espacio en 1977 contiene grabaciones de saludos en 55 idiomas, la propia risa de Sagan, las ondas cerebrales de su novia, sonidos de la Tierra como olas, rayos, volcanes… unas 118 imágenes, 90 minutos de música con temas de Bach, Beethoven, … y el canto de estas ballenas jorobadas ☺
Sintiéndome una terrícola feliz y suertuda, cerré de nuevo los ojos y continué disfrutando de esta mágica nana marina que viaja entre olas, corrientes, planetas,… y estrellas.
Te Cuento de Viajes 
Qué maravilla, compañera. Vaya aventura oceánica más chula. Escuchar el canto de las ballenas y por sorpresa… Tiene que ser una maravilla… ni me lo imagino. Ese tipo de cosas son las que más bonita hacen una experiencia. Y es entonces cuando sabes que ese era tu lugar, que estaba escrito que tenías que estar allí en aquel preciso instante. Que el camino te conducía hasta allí de manera inexorable para vivir ese momento concreto. Es magia.
Me ha encantado conocer este pequeño viaje a esa pequeña isla olvidada. Y las garabatas de hoy y el fondo marino y todos sus habitantes. Preciosa experiencia y precioso relato marinero ballenero. Un besote con sabor a sal marina 😘 mi querida Cristina.
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¡¡Imagina la sorpresa maifren!! 😀 ¡¡fue un momento orgásmico 😀 !!! ya te digo que ni en mis mejores fantasías marineras lo soñé 😀 lo veía tan poco probable… 🙂 sin duda fue un maravilloso regalo de la vida 🙂 Y sí compañera de teclas, fue un día con mucha magia 🙂
Me alegra que te haya molado el diminuto islote y sus habitantes 🙂 muchas gracias mi querida MJ por tus bonitas palabras 🙂 me quedo con tus besitos salados y te mando un abrazo azul turquesa.
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Una experiencia maravillosa, de ésas que se guardan en el corazón y se recuerdan a menudo.
Un abrazo
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Sin duda compañera, esta es de esas experiencias que se guardan para siempre, en la memoria, en el corazón y en las entretelas 🙂 Un abrazo enorme linda Gladys, gracias por estar cerquita 🙂 XXXOOO
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Guaus!!!
Vivir ese contacto ha de ser una experiencia vivificadora, mágica, como experimentarlo con seres de otro planeta (porque estoy pensando en una película de Star Trek «objetivo salvar la tierra», en el que el canto de las ballenas es el sistema/lenguaje de comunicación con otros «seres» que vienen a ver cómo estamos pero nadie puede contestar porque las ballenas se han extinguido…)
Y me han gustado mucho los dibujos, también!!
Abrazos balleneros😊❤️
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La verdad que fue tan surreal, especial, mágica, que casi rozaba un poco lo extraterrestre 🙂 sonaba como a algo de otro mundo, de otro planeta…quizás por eso cuando miré al cielo recordé el disco de la Voyager 🙂
Pues ese lenguaje que mencionas sería un curioso sistema de comunicación tirando a triste, quizás recordaría a la melancolía de los fados 🙂
Mil gracias por tu calorcito linda Note, me alegra que te hayan gustado las ilustraciones del cuento viajero 🙂 ¡Abrazos siderales!
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Qué experiencia tan especial! Y con esa nana oceànica de remate.
Gracias por compartir Isla Iguana con nosotros.
Muchos besitos.
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🙂 Fue una experiencia sorpresa y muy especial 🙂 si cierro los ojos aún la veo y la escucho 🙂 Gracias siempre a ti linda Salodari por tu calorcito reponedor 🙂 Un abrazo grande como el océano XXXOOO
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Qué entrada más bonita. Me ha encantado leer vuestra aventura naturalista. Sin duda una experiencia única. Yo solo he visto delfines en delfinarios y orcas en cautividad, pobrecitos. Pero este verano, en Tenerife, fuimos en barco a navegar frente a los acantilados de El Gigante con la intención de avistar delfines y algún cetáceo. Delfín no vimos ninguno pero, al cabo de una media hora, avistamos a lo lejos lo que el guía dijo que eran calderones, que luego he sabido que también se les conoce como ballenas piloto. Llegamos a estar muy cerca de un buen número de ejemplares. Nunca hubiera creído que esa imagen habría llegado a emocionarme como lo hizo. Aun no sé muy bien porqué, pero se me hizo un nudo en la garganta. Ver esos animales, en su habitat, sin que nadie les importune (aunque ignoro si la cercanía de los humanos curiosones les incordia de algun modo) me emocionó. Después supe que a mi hija menor le ocurrió lo mismo. Ya somos dos en la familia, jeje.
Ojalá hubieran más reductos como el que describes para preservar y observar de forma inocua la fauna marina.
Un abrazo.
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Cuanto me alegra leer que te ha gustado el relato compañero de teclas 🙂
Yo no soy nada amiga de acuarios ni delfinarios 😦 Pero los avistamientos de cetáceos en libertad, si se realizan correctamente (existen protocolos que regulan la actividad; determinan el nº de barcos, distancias,…) puede llegar a ser una actividad sostenible. A nivel nacional, por ejemplo en Canarias y aquí en el área del Estrecho de Gibraltar, está bastante regulado. En muchas otras partes del mundo también existe mucha concienciación y cumplimiento de normas (Alaska, Canadá,….) Aunque, como en todo, también existen lugares que incumplen toda normativa…. y es por eso que siempre recomiendo antes de realizar la actividad buscar referencias de las diferentes empresas de la zona que ofrecen el servicio para elegir la más ética/eco-responsable.
El avistamiento de cetáceos en libertad es una actividad que no suele dejar indiferente a casi nadie 😀 entiendo ese nudo que comentas, lo vivo siempre 😉 , lo he visto muchas veces en los demás… Sin duda es una experiencia muy especial, algo mágica,… que quizás nos recuerda lo pequeñito que somos 😉
Los delfines en libertad también regalan momentos increíbles y espectaculares 🙂 Los calderones son preciosos, con un comportamiento mucho más tranquilo. Se llaman «ballenas piloto» porque dicen que guiaban y acompañaban a los marineros, también se les llama «durmientes» 😉 por pasar mucho tiempo descansando en superficie. Hay dos especies, el común y el tropical, aquí en el Estrecho el común es una especie residente…y con ellos he tenido encuentros preciosos 😀 no olvidaré a una cría mamando en la proa del barco 😀 otro momentazo de esos que se quedan para siempre.
Por pasión y por deformación profesional 🙂 nosotros solemos buscar ballenas allá por donde vamos 😀 por tierra, por mar y por aire 😀 y es sin duda una actividad muy recomendable 🙂 Si venís por el Sur avisa 😉 y buscamos soplos 😉
Mil gracias mi querido Josep por tu tiempo y por sumar 🙂 te mando un abrazo enorme.
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Se me olvidó añadir que las ilustraciones son preciosas.
Otro abrazo.
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jajaja muchas gracias compañero 🙂 a mi me mola mucho como ha quedado el avión con la melena pelirroja al viento 😀 jajaja
Otro abrazo y besitos a repartir.
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No sabría decir si he disfrutado más del texto, de las fotos o de tus estupendos dibujos. Muchas gracias por compartir esta experiencia. Un abrazo.
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Muchas gracias a ti Carlos, por tu tiempo y bonitas palabras 🙂 cuanto me alegra saber que lo has disfrutado 😀 Un abrazo enorme!.
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Sin duda la experiencia debió de ser genial porque se refleja en tus ilustraciones, me encantan:) Un abrazo y que pases feliz domingo, o lo que queda de el…:)
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Muchas gracias vagandopormundopolis 🙂 cuanto me alegra leer que te han gustado las ilustraciones 🙂 Un abrazote grande y buen comienzo de semana!! 🙂
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Buah… me dejas sin palabras. Tus entradas son ALUCINANTES, MARAVILLOSAS.Qué suerte vivir esa increíble experiencia del canto de la ballena y todo lo demás. La verdad, a mí que me ha encantado viajar y lo he hecho un poco, es que he pensado muchas veces que «das asco», dicho con todo el cariño y el cachondeo, por lo mucho que has viajado y la cantidad de lugares en los que has estado. Y envidia, me das mucha. En fin, alucinante experiencia y lugar. Preciosos dibujos y gran post.
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Eso va a ser que tu me lees con buenos ojos compañero 😉 MUCHAS GRACIAS 🙂 me alegra leer que te gustan mis letras.
Que conste en actas que mi intención no es dar envidia, es a) dar info para preparar un viaje b) inspirar 😉 … o remover ese espíritu nómada, viajero, que muchos de nosotros tenemos 😉 recordar los encantos de levantarnos del sofá, de la silla gris, … de abandonar a ratos nuestro Derinkuyu particular 😉 y salir más allá de nuestra cueva, salir de esa llamada zona de confort, que parece estar tan de moda 😉 , aunque sea a la vuelta de la esquina.
¿Sabes? cuando escribí esta entrada me acordé de ti 🙂 por toda la controversia que hubo con los Beatles y el disco de la Voyager 😀 supongo que conoces la historia 😀
También me acordé de ti cuando escribí el post de los idiomas y viajes 😀 te lo dejo por aquí por si te apetece pasar algún día 🙂 creo que te molará ver mis kanjis 😀 jajaja y conocer una historia curiosa 😉 https://tecuentodeviajes.wordpress.com/2018/10/10/idiomas-y-viajes/
Mil gracias por tu agradable compañía dominical compañero 🙂 Un abrazote.
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Ya… jajaja, me haces reír. Se supone que tu intención no será dar envidia, solo faltaría eso. «Nuestro Derinkuyu particular», muy buena esa. Nuestra cuevita, efectivamente, nuestra llamada zona de confort.
Sobre la placa del Voyager recuerdo haber leído que hubo cierta controversia sobre qué fragmentos musicales poner, supongo que algunos serían partidarios de poner cosas de los Beatles y otros no. No sé, si leí cosas hace mucho tiempo de ello…
Ya leí tu post sobre los idiomas. Muy bueno, veo que has hecho un poco los deberes. Sí, kita, minami, nishi, higashi, los cuatro puntos cardinales. Ya te dije que el japonés es muy bonito e interesante, los kanjis a niveles básicos entran bastante bien, como estos. Después se va complicando con palabras compuestas y oraciones.
Aunque no creo que vayas a usar esta frase en particular, para preguntar dónde está algo, por ejemplo «¿dónde está el norte?», sería así: Kita wa, doko desu ka? También… kita wa, doko ni arimasu ka? Las dos formas son equivalentes. Esta es la forma de hacer preguntas, la frase terminando en «desu ka?». La «u» de desu es muda. Hala, una pequeña clase de japonés,
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😀 Me alegra esa risa 😉 Pues con los Beatles ocurrió que Carl Sagan quería incluir algún temazo, la idea molaba, pero no cuadró-cuajó, al parecer por líos con la productora y desacuerdos.
El japonés me ha resultado muy atractivo 😀 pero sobre todo me ha molado el arte de la caligrafía ¿Shodō? 😉 me quedé hipnotizada viendo vídeos de una abuela japonesa mostrando todo el ritual, proceso,…de la escritura tradicional. Ya lo conocía, había visto algo, pero no demasiado…es todo un mundo 😀
Yo me veo solo dando las gracias, los holas y adioses… 🙂 haciendo reverencias…y en caso de necesidad me veo más recurriendo al pictionary o a la mímica o a google que memorizando frases 🙂 creo que mis neuronas están algo mayores para los idiomas 🙂 pero tomo nota en papel, en mi cuaderno viajero 😉 y así no se olvida. Hontōni arigatō, yūjin 😉
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«Hontō ni» era un adverbio que utilizábamos mucho en clase («en verdad», «realmente»). Desde luego la caligrafía japonesa es todo un arte milenario, algo sobre lo que nunca he profundizado. Muy bonitos los kanjis hechos con pincel, y las connotaciones van más allá de la escritura, como sabrás: espirituales, filosóficas, estéticas, terapéuticas…
Te podría contar infinidad de cosas sobre los kanjis, de nuevo es algo muy interesante. Básicamente hay unas pautas para dibujarlos: se escriben de derecha a izquierda, de arriba abajo y de fuera hacia adentro. Me refiero a los trazos, que también se cuentan. El hecho de contarlos ayuda a clasificar los kanjis por número de trazos y este es uno de los criterios que se usan para organizarlos y catalogarlos en los diccionarios. Hay otros criterios un poco más complejos. Desde luego un diccionario de japonés es algo alucinante por muchos motivos. Tú puedes buscar determinadas palabras y kanjis por el número de trazos, por las lecturas que tienen esos ideogramas, etc.
¿Y puedo preguntar cuando os vais a marchar, o es un gran secreto? Supongo que antes de navidades…
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(Me equivoqué: los trazos se dibujan de izquierda a derecha).
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Anotado queda 😀 pues es cierto que el orden de los trazos, al parecer, altera el producto 😀
Podrías escribir un post sobre el idioma japonés 😀 yo te animo a ello 😀 O si te apetece y mola, se me acaba de ocurrir que, podrías hacer un post que fuera de utilidad para los viajeros 😉 y si quieres lo publico aquí en el blog como una colaboración 😀 o lo cuelgas en el tuyo y te enlazo, lo que prefieras 🙂 No te creas que en la red hay mucho japonés básico para viajeros, yo en la fase preparativos he echado de menos un buen recopilatorio,… 😉 Ya me dirás que te parece esta idea instantánea 😀
Un besote.
P.D.: Que conste en actas compañero que me he quedado con la intriga/duda de si conocías los dos idiomas locales que comento en el post… no son tan curiosos como los kanjis, pero son también muy molones 🙂 ¿no crees?
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😮 me he quedado «estupefactada» con la mecánica de los diccionarios 😀 jajaja vaya paranoia más interesante y curiosa, la verdad es que no me había imaginado como sería un diccionario de kanjis 😀
La escritura es un ritual con todas sus letras 🙂 desde la preparación de la tinta, la colocación del papel, al agarre del pincel,…el nº y orden de lo trazos,… la respiración, hasta la colocación de la espalda…y efectivamente, encierra filosofía, terapia, espiritualidad… además de mucha belleza.
Pues te cuento que nos queda ya poquito 😉 dos semanas muy mal contadas 😀 ¡¡¡que ganas de japonear!!! El gran secreto y sorpresa es precisamente donde estaremos en Navidades 😉 que lo contaré prontito en el blog 😀
Muchas gracias por sumar compañero 🙂 siempre aprendo mucho contigo y es un placer 😀 Otro abrazote y buen comienzo de semana.
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Hola otra vez (contestaré aquí). Sobre escribir un post sobre el idioma japonés, me encantaría, y es más, se me ha pasado por la cabeza a veces, y a raíz de tu viaje también. Pero la verdad, hoy por hoy dudo muchísimo que pueda hacerlo. No tengo tiempo para casi nada, no sé qué me está pasando pero estas últimas semanas no me está cundiendo el tiempo demasiado. Los quehaceres diarios, el trabajar, los desplazamientos, las puñetitas y arreglos del piso (que me llevarán semanas y semanas y que no puedo dejar de lado), en fin… Seamos realistas, se necesita tiempo y apenas tengo, los días libres me pasan en un suspiro. La prueba es que llevo 22 días sin publicar nada. También estoy más desganado y cansado. Pero anotada queda la idea, quién sabe si en un futuro. La verdad que un post así, sobre frases genéricas para un viaje sería un trabajazo, y para mí también un esfuerzo, porque desde que acabé de estudiarlo en el 2003 no he vuelto a tocarlo ni utilizarlo. En fin, ahora priorizo otras cosas,incluso a nivel de escribir.
Sobre tu entrada sobre los idiomas, que debo confesar que leí por encima, lo siento, pues algunos los conozco de oídas, como el squamich en Canadá y el náhuatl mexicano. Me pareció muy divertido y sorprendente el idioma gibraltareño, qué fuerte, ni idea, pero el que más me sorprendió fue el armenta: usos parecidos al esperanto, pero jamás, jamás había oído hablar de él.
Oye, si tengo tiempo uno de estos días te haré una demostración de cómo funcionan las palabras con más de un kanji en japonés. Se puede aplicar incluso a algunos nombres de lugares (que tú mencionas y que efectivamente son de lo más difícil e indescifrable, porque algunos incluso vienen del japonés más antiguo; pero no todos, algunos se entienden fácil). En fin, sé que si te explico eso te vas a enganchar, jejeje…
Besos.
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Te entiendo perfectamente compañero de teclas… a veces no cabe la vida 😀 Pero lo bueno de mi idea es que nadie mencionó el cuando 😉 😀 así que ahí queda para cuando quepa y te apetezca retomar ese japonés que tanto te mola y que tienes aparcado 😉
😀 Mi intriga era por el armenta y el llanito 😀 sobre todo por el armenta 🙂 mucho más desconocido. Me pregunto como sonaría esa lengua culta 😀 Si como prometía su creador se aprendía en un solo mes 😉 seguro que era más fácil que el japonés 😀 jejeje
Un abrazo mi querido What.
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