Te Cuento de Viajes

Teníamos claro que en nuestro roadtrip a Oporto incluiríamos una parada en la pequeña localidad de Tomar, queríamos conocer su interesante pasado Templario, y visitar su espectacular castillo y convento declarados Patrimonio de la Humanidad.    

Este tesoro del camino se esconde en el corazón de Portugal, a la altura del Medio Tajo, a unos 100 km al norte de Lisboa y a unos 100 km de España.

La ciudad de Tomar ronda los cuarenta mil habitantes y se encuentra dividida en dos por el río Nabão, al Oeste el viejo casco histórico, al Este la zona más nueva, y en las alturas la silueta rotunda del Castelo de Tomar.

Aparcamos en el primer sitio que encontramos, una económica zona azul frente al molino de agua del parque do Mouchão.

El cauce fluvial, una pequeña presa-azud, algún puente, hidropedales … el agua le da un ambiente diferente a la ciudad. Vemos una garza, algunos patos y cisnes, y sin entretenernos demasiado, ponemos rumbo al imponente castillo.

Se puede subir en coche, arriba también hay parking tipo zona azul, nosotros preferimos cruzar parte del casco histórico y subir a pie por una de las dos cuestas que llevan al castillo. Tomamos la más corta, empedrada y empinada, es conocida como la calzada medieval de Santiago. La subida por la carretera principal, es algo más larga, pero con una pendiente más suave y una cómoda acera.

Llegamos a la sencilla Puerta de Santiago, por ella se accede al conjunto monumental del Castillo y Convento de Cristo, declarados Patrimonio de la Humanidad y Monumento de Interés.

Tras un primer recodo y cruzar la ojival Puerta del Sol, aparecemos en la Plaza de Armas, con un puñadito de ordenados jardines, setos y algún naranjo.

Como todo buen castillo sus vistas desde las alturas son perfectas para ver llegar al enemigo, atacar y defenderse, hay torres y almenas, saeteras y troneras,…

Pero el castillo de Tomar, no es un castillo cualquiera, fue construido en el siglo XII por la famosa Orden del Temple, es un castillo muy especial que guarda en su barriga una curiosa iglesia y un interesante convento.

Cuenta la leyenda que el gran maestre templario Gualdim Pais, usó artes esotéricas y adivinatorias para saber donde mandar a construir el castillo.

Eligió el lugar de culto de la antigua ciudad romana de Sellium, reutilizó las piedras para levantar los cimientos, y colocó la vieja estela que protegía a la ciudad romana en la Torre del Homenaje.

Cuenta la Historia que cuando en el siglo XIV fue prohibida en Europa la Orden del Temple, aquí en Portugal hicieron una especie de apaño, les absolvieron de todos los cargos, le cambiaron el nombre y algunos estatutos…juraron obediencia al rey y siguió funcionando. Pudieron conservar sus muchas tierras y bienes, su atuendo blanco y la roja cruz algo modificada.

Se le llamó la Orden de Nuestro Señor Jesucristo, y la ciudad de Tomar se convirtió en la Sede Oficial.

El castillo de la ciudad era un auténtico castillo High Tech, tenía la tecnología más punta del momento, era avanzado, innovador… Fue el primero en usar una campana como nueva técnica de defensa, posee una doble y altísima muralla, empinadas rampas llamadas alambor,… Fue un castillo infranqueable y hoy es el castillo templario mejor conservado de Europa.

De lejos vemos la Torre del Homenaje, la de la Reina, la de la Iglesia,… un solitario olivo… y la puerta principal del templo. Una Doña puerta, muy gótica y manuelina, diseñada por un arquitecto cántabro y que nosotros encontramos cerrada.  

La taquilla y acceso al Convento de Cristo quedan muy cerca del bonito pórtico. De octubre-mayo abre de 9h a 17:30h, de junio-septiembre de 9h a 18:30h. Cerrado los días festivos, 1 de enero, Semana Santa, 1 de mayo y 25 de diciembre. A comienzos de 2020, nos costó 5€. Aquí, en la web oficial, puedes actualizar precios y horarios.

Entramos al enorme convento de la Orden de Cristo, formado por más de media docena de claustros, y considerado como una de las mayores obras Renacentistas del país.

Nos recibe un primer claustro blanqui azul, el Claustro del Cementerio. Tiene bonitas vistas, azulejos,… y un nombre muy bien puesto. El gótico lugar está salpicado por unos cuantos sepulcros en piedra, y su suelo está plagado de numeradas losas sepulcrales de caballeros templarios.

Continuamos y aparecemos en el Claustro del Lavadero. En la planta superior estaban los cuartos de los caballeros, en la inferior las habitaciones del servicio, cocina, almacenes, talleres…

Atravesándolo llegamos al sobrio Claustro Principal, también tiene dos pisos, una planta cuadrada y una fuente rodeada por la cruz de la Orden.

En las esquinas de la planta superior hay unas escaleras helicoidales para acceder a la Terraza de la Cera, nosotros las encontramos cerradas al paso.

Leí que para reunirse los novicios usaban el Claustro de los Cuervos. Un lugar de encuentro con una sola planta, galerías de doble arcada, un sencillo pozo…

Las visitas se alojaban en el Claustro de la Hospedería, los nobles dormían en la primera planta, y en la baja los peregrinos.

No es habitual ver ‘tanto claustro junto’ en un mismo edificio, hay un total de ocho y esto lo convierte en uno de los conventos más singulares de Europa.

Un par de claustros, el del Cementerio y el Lavadero, fueron mandados a construir por el Infante Don Henrique, y fue durante el mandato del rey João III cuando se construyeron una media docena; el Claustro Principal, el de la Hospedería, el de los Cuervos, Micha, Santa Bárbara, y el Necessárias, que es el más pequeño de todos.

El ambiente tiene un punto lúgubre, había rincones en sombra, iluminación tenue,… mucha penumbra…

En el oscuro Corredor de las Celdas, los largos pasillos se cruzan en cruz y dan acceso a las celdas o habitaciones de los monjes.

El convento es grande y es fácil desorientarse en sus tripas, es casi un laberinto de similares pasillos, escaleras, arcadas y galerías en todas las direcciones,… De vez en cuando encontramos oportunas indicaciones que ayudan a no perderse.

Desde algunas salas, terrazas y patios, se puede admirar la fachada de la iglesia, en ella la protagonista absoluta es una espectacular ventana con una decoración muy manuelina.

Se llama la ventana del Capitulo, y posee una llamativa maraña de mil símbolos, iconos y detalles… Algunos de ellos relacionados con la navegación,… había boyas, maromas, el gran orbe o esfera armilar, … y un buen puñado de líquenes.

Hoy solo quedan dos ventanas de las tres que hubo, una fue destruida y otra quedó muy escondida. Dicen que un cabreado y resentido João III las hizo ocultar para tapar la memoria de su padre Manuel… quien le robó a su prometida.

En las plantas inferiores encontramos la inacabada Sala Capitular, más pasillos, un aljibe cerrado al público…

En las plantas superiores tropezamos con capillas y pequeñas sacristías como la Nueva o la de los Portacarreiros.  

Están decoradas con sencillos altares, bonitas bóvedas, azulejos,… la cruz de la Orden…

Hay dos iglesias, una del siglo XII y otra del siglo XVI, se encuentran comunicadas por un enorme arco triunfal y forman un único templo. Es en la zona más antigua y templaria donde se encuentra una impresionante Capilla Mayor conocida como la Charola.

La Charola es el corazón del castillo y convento, era el oratorio privado de los Caballeros.

Su curioso altar de planta octogonal está considerado como un raro ejemplo de iglesia en rotonda, y su imponente bóveda fue construida usando de inspiración el templo de Salomón en Jerusalén.

La columna central me recuerda a una palmera, en su centro hay esculturas de ángeles, santos, profetas… y un Jesús crucificado que asciende o desciende de la metafórica cúpula.

Hay un órgano y coro, algo de estuco, retablos, brillantes y restauradas policromías en madera, en cuero,… En sus orígenes no estaba tan decorado, era más sencillo, y al parecer los monjes-caballeros entraban y salían a caballo.

La Charola está plagada de simbología y cuarto y mitad de misterios. Hay muchas referencias al número ocho, el nº mágico de la Orden del Temple, cuadros donde falta un apóstol o sobra una lengua de fuego, referencias a María Magdalena, pies con cuatro dedos, manos con seis…

Me sorprendió mucho este interesante altar circular, me gustó poder rodearlo y ver sus distintas perspectivas, sentirme diminuta bajo la imponente bóveda, … la oscuridad y soledad…

Retrocedimos sobre nuestros pasos y visitamos la cocina con el enorme horno, el comedor o refectorio, salas de estudio, scriptorium…

Aquí residió diez años Henrique El Navegante y desde aquí se organizaron grandes viajes a China, Japón, Brasil… Aunque el Infante navegó muy poco, con su dinero se financiaron campañas y se contrataron astrónomos, cartógrafos y geógrafos, que jugaron un papel muy importante en las exploraciones por África, Asia y las Américas.

La roja cruz que ondeaba en las naves portuguesas era la cruz de esta Orden de Cristo, considerada sucesora de la Orden del Temple. Casi todos los caballeros se hicieron navegantes, y algunos navegantes se ordenaron caballeros, Vasco de Gama, Cabral, Zarco, Bartolomé Díaz … Cuentan que los muchos conocimientos y mapas secretos que poseía la Orden, quizás les sirvieron para ser adelantados pioneros.

Hay quien dice que “Tomar fue la capital espiritual de los templarios y un faro para el nuevo mundo”.  Entre estas paredes se estudiaron mapas y nuevas rutas, se formaban a misioneros, se les retiraba el voto de celibato a quienes querían crear una familia en las nuevas tierras,… nació una rama contemplativa dedicaba solo a rezar por todos los lusos que navegaban.

Salimos a la terraza exterior para ver la llegada del enorme acueducto que abastecía al complejo. Aunque el aljibe y los pozos suministraban agua suficiente para el consumo, faltaba agua para el riego de los huertos.

Por ello, en los siglos XVI-XVII, construyeron el acueducto de Pegões. Tardó 21 años en terminarse la obra, tiene 6km y 180 arcos de medio punto.

Durante estos siglos y posteriores se hicieron grandes reformas y algunos destrozos en el castillo, fueron destruidas parte de las murallas, puertas, alguna torre… pero su estado de conservación es muy bueno.

Nos gustó mucho el convento, con mil rincones para explorar y perderse, pasillos, recovecos, … Un lugar plagado de Historia y de historias, una visita muy recomendable. A la salida encontramos la típica tienda de recuerdos, con venta de cuadernos, tazas,…

A los pies del castillo se desparrama la vieja Tomar, con calles peatonales salpicadas de pequeñas tiendas, cafeterías,… y pastelerías donde probar la fatia, un dulce local típico elaborado con yema y azúcar,… También podrás saborear las queijadas de almendra y calabaza, los hilos de huevo, dulces de cama, y los bésame deprisa.

La plaza principal es la de la República, en ella se encuentra el Ayuntamiento y la iglesia de San Juan Bautista, patrón de la Orden del Temple. Frente a su puerta hay una estatua del maestro templario Gualdim Pais fundador del castillo.

Tomar tiene un alma templaria, solera medieval, un pasado romano visible en su puente y en pedacitos de sus termas, y alguna huella judía. Aquí se encuentra una de las sinagogas mejor conservadas y más importantes del país, hoy restaurada y convertida en museo.

Se puede visitar la Capilla de San Lorenzo, la de San Gregorio, la iglesia de la Virgen de la Concepción,… y la interesante iglesia de Santa Maria Olivais donde se encuentra la tumba del maestro templario G.Pais, una imagen de la Virgen de la Leche, y una curiosa estrella de David. Se le considera la iglesia matriz de muchas que nacieron en las américas.

Hay algún pequeño parque como el de Mouchao, y los jardines de la Mata Nacional dos sete Montes. Y si te molan los museos rarunos, encontrarás uno dedicado al fósforo, que al parecer exhibe la mayor colección de cajas de cerillas del mundo, se encuentra en el antiguo monasterio de la iglesia San Francisco.

Debe ser muy interesante visitar la ciudad cuando los tomarenses o nabantinos celebran la fiesta de los Tabuleiros o del Espíritu Santo. Es una de las más importantes y antiguas del país, está considerada la madre de todas las fiestas lusas, y la localidad está intentando que sea reconocida Patrimonio Inmaterial de la Humanidad.

Tiene lugar cada cuatro años, siempre a principios de julio, y no volverá a celebrarse hasta 2023. En la curiosa procesión se desfila en pareja, y son las niñas y mujeres, vestidas de blanco, quienes portan unos tableros en la cabeza cargados de flores de papel, 30 panes y trigo. La columna debe tener la altura de la portadora, estar rematada con una cruz o una metafórica paloma, y suele pesar entre 3-5-8Kg.

Realmente es una ofrenda de pan, cuyas raíces paganas se pierden en el tiempo, y parecen estar relacionadas con la fertilidad y la diosa romana Ceres.

Además de la procesión, hay desfiles, juegos tradicionales, comida…  las calles se decoran con flores de papel que hacen sus habitantes.

Nosotros acabamos el día buscando un lugar para cenar y durmiendo en una pequeña casa rural con mucho encanto. Se llama Lameira da Longra, se encuentra a menos de 8km del centro de Tomar.

Lo reservamos sobre la marcha, a través de Booking, y resultó ser el alojamiento sorpresa del viaje.

Hay alojamientos que dejan una huella especial, algunos por coquetos, o por la calidad de los desayunos,… o por sus anfitriones… Aquí nos gustó todo, desde el aguardiente de bienvenida, al rico desayuno, la hospitalidad y amabilidad de Fernanda y Fernando, …los pequeños detalles que habitan y dan vida a esta antigua casa familiar.

Por la noche sentada en el patio, bajo una parra espeluchada por el invierno, tuve una agradable charla con Fernanda. Me comentaba que en los alrededores hay senderos para caminar, pequeños saltos de agua, bosques, cuevas,… se puede hacer algún tramo del Camino de Santiago, …

Tomar fue un bonito punto y final para nuestro patrimonial roadtrip. Nos sorprendió mucho el imponente Castillo y Convento de la Orden de Cristo, realmente esta joya templaria se merece una visita .

Quedan muy cerca otras localidades molonas como Alcobaça, Constância,… Nazaré, Obidos, Leiria… Castelo de Almourol, Ourém… perfectas para incluir en una ruta. Nosotros solo tuvimos tiempo para visitar el vecino Monasterio de Batalha, también declarado Patrimonio de la Humanidad.

Aquí te dejo la ruta de nuestro roadtrip, aquí info de Oporto y aquí una web con info de Tomar, donde puedes actualizar horarios, consultar la agenda cultural…   

Después de una semana mal contada, regresábamos a la casilla de salida, volvíamos a casa y lo hacíamos contentos, encantados con la escapada… y con ganas de volver algún día para explorar, más y mejor, el bonito corazón de Portugal.